Netflix se estrena en el Reino Unido e Irlanda: sólo cuesta 6,99 euros al mes

Hacía tiempo que se esperaba que Netflix debutara oficialmente en Europa, pero por un motivo u otro su estreno se había venido retardando durante meses. Hasta ahora. Y es que desde esta misma mañana los británicos ya pueden acceder al servicio de vídeo bajo demanda que más está dando que hablar en los últimos tiempos y que cuenta, sólo en Estados Unidos, con más de 20 millones de clientes.

Tras llegar a acuerdos con la BBC, Sony, Disney, Paramount Pictures, Channel 4, Lionsgate, Miramax, ITV y la Metro Goldwin Mayer para asegurarse un enorme catálogo de películas, documentales, series y espacios de televisión que ofrecer a sus futuros clientes, la compañía estadounidense ha lanzado, hace sólo unas horas, su plataforma en el Reino Unido e Irlanda, los primeros países europeos en los que lo hace.

Como oferta de lanzamiento, los internautas que se registren pueden probar el servicio gratuitamente durante un mes y comprobar si cumple con sus expectativas antes de firmar ningún contrato. Pasado ese periodo, el precio es de 5,99 libras al mes en el Reino Unido y de 6,99 euros en Irlanda.

Tal y como sucede en Estados Unidos, se puede acceder a Netflix directamente desde el ordenador o mediante aplicaciones ya disponibles para smartphones, tablets, la Xbox 360, la PlayStation 3 y multitud de dispositivos como reproductores multimedia, Blu-Rays, etc.

Desde la distancia, da la impresión de que Netflix cuenta con todo de su parte para repetir en tierras británicas el éxito que está cosechando en Estados Unidos y Canadá. A poco que el catálogo que ofrezca a sus clientes acompañe, no sería de extrañar que en unos años los operadores de telecomunicaciones de las islas se encuentren, tal y como sucede desde tiempo en Norteamérica, con que el tráfico generado por Netflix supera al de las descargas de BitTorrent.

Y es que la mejor manera de combatir a BitTorrent, Megaupload, Ares, Rapidshare o eMule no es acusando a los internautas de ladrones y piratas, sino ofreciéndonos la posibilidad de acceder a servicios de calidad a precios competitivos. Ejemplos como el de Netflix o el de Spotify hace tiempo que lo vienen demostrando.

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