La inteligencia artificial podría reemplazar a 300 millones de trabajadores

En cuestión de meses, la inteligencia artificial ha pasado de ser un concepto propio de las películas de ciencia ficción a convertirse en una tecnología que está presente en productos comerciales y cuyas aplicaciones futuras van a redefinir muchos aspectos de nuestras vidas e, incluso, de nuestras profesiones.

A este respecto, un informe encargado por el banco de inversión Goldman Sachs recoge que la inteligencia artificial podría reemplazar el equivalente a 300 millones de puestos de trabajo a tiempo completo en unos años. En el caso concreto de Europa y Estados Unidos, se estima que una cuarta parte de las tareas que actualmente llevan a cabo los empleados podrían ser asumidas por esta tecnología.

En el documento se apunta que las mejoras en productividad que su implementación traería consigo podrían incrementar en un 7% el valor total de los bienes y servicios producidos a escala global. Eso, añado a modo de apunte personal, sólo sucederá si la IA se utiliza para complementar y aumentar la eficiencia de los trabajadores, pero no si se implementa para sustituirlos y dejarlos fuera del mercado laboral.

Su impacto variará mucho según los sectores. Se estima, por ejemplo, que el 46% de las labores administrativas y el 44% de las jurídicas se podrían automatizar pero, en cambio, sólo el 6% de los oficios relacionados con la construcción y el 4% de los asociados al mantenimiento se verían afectados.

Los efectos de ChatGPT y Bing Chat ya se están empezando a notar en algunas profesiones como el periodismo, puesto que ambas herramientas son capaces de generar artículos a partir de una serie de simples instrucciones en las que tan solo se les debe indicar la temática de los mismos, su extensión y el tipo de lenguaje a emplear.

A medida que la inteligencia artificial vaya desembarcando en otros tejidos productivos, su impacto irá aumentando. En ocasiones lo hará de manera positiva, pero no hay que olvidar que en otras podría hacerlo en sentido contrario. En estos momentos, existe una gran incerteza sobre qué sucederá en el futuro. Lo único seguro es que los cambios que va a provocar van a ser masivos y que las sociedades debemos preparanos para ello.

FOTOGRAFÍA: HEADWAY

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