Google patenta un sistema de pago mediante SMS

Últimamente, media Internet anda revolucionada ante los rumores que apuntan a que Google podría estar a punto de lanzar un teléfono móvil que integraría gran parte de los servicios online que ha estado desarrollando en los últimos años, como es el caso de Gmail o Google Maps.

Como es norma habitual en el buscador, ninguno de sus dirigentes ha soltado prenda al respecto. Es más, no lo harán hasta que el móvil esté listo para ser comercializado, si es que realmente los rumores son ciertos, cosa que todavía está por ver. Así pues, gran parte de la información que circula sobre este asunto en blogs y medios especializados está cogida con pinzas y fundamentada en simples indicios, cuando no en invenciones.

En este sentido, ayer se conoció que Google ha patentado un sistema de pago a través de SMS que ya hay quien apunta que podría ser una ‘killer application’ que implementaría el nuevo móvil, que lo diferenciaría del resto y que permitiría a sus propietarios realizar micro-pagos en máquinas expendedoras, en tiendas que así lo permitan o acceder a todo tipo de servicios. Aunque la patente no es nueva -data del 28 febrero del 2006-, no se había sabido nada de ella hasta ahora… almenos eso creo.

Más allá de especulaciones varias, lo cierto es que Gpay, que es como parece que se llamará este método de pago, está pensado para extender las redes de Google más allá del mundo online y, de paso, adentrarse en el lucrativo mercado de la telefonía móvil. En la imagen que os muestro a continuación, incluida dentro en la documentación que el buscador aportó para solicitar la patente, se muestran diversas situaciones en las que sería de utilidad Gpay:

Teniendo en cuenta las características de la plataforma, es evidente que su éxito pasa por llegar, por darse a conocer, entre tantos usuarios como sea posible. Así pues, la lógica invita a pensar que Google tratará de llegar a acuerdos con los fabricantes de teléfonos móviles para que estos incluyan este sistema en los nuevos modelos que lancen al mercado. Cualquier otra estrategia limitaría considerablemente su popularización y adopción entre el público.

En cualquier caso, el tiempo dictaminará cuál es la decisión que adopta Google, cómo acaba llamando a este sistema de pago, si al final lo integra en su -presumible- móvil y si lo abre o no a los terminales del resto de fabricantes.

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