
Stephen Fry es un personaje fuera de lo común. Ayer, una vez más, lo volvió a demostrar, acudiendo al iTunes Live ’09, un festival de música que se está celebrando en Londres y que cuenta en su cartel con nombres como Oasis, Snow Patrol, Franz Ferdinand o Placebo, para dar una charla sobre los derechos de autor y el futuro de la música en la que explicó que habitualmente se descarga episodios de House y 24 de BitTorrent.
Ante la sorpresa generalizada de los organizadores del evento, cargó contra las discográficas por acusar y llevar a juicio a los usuarios de programas P2P y a las autoridades, que han encargado la elaboración de unos informes sobre la situación y la regulación que se debería llevar a cabo en Internet que no concuerdan, ni de lejos, con la opinión de los ciudadanos.
Fry dejó claro que está en contra de los internautas que descargan cientos de series o películas y cantidades inimaginables de canciones, pero en cambio mostró una postura tolerante hacia quienes lo hacen de manera mucho más moderada, como es su caso.
Este actor, humorista, director, escritor y presentador británico es un reconocido adicto a Internet y a las nuevas tecnologías que, entre otras cosas, tiene más de 600.000 seguidores en su cuenta de Twitter y se enorgullece de poseer el segundo Mac que se vendió en el Reino Unido.