¿Puede ser Menéame un negocio rentable?

Hace unos días, la revista XLSemanal dedicó un artículo a los proyectos hispanos online de mayor éxito, aquellos que partiendo de la nada se han posicionado de manera inmejorable en sus respectivos sectores y han conseguido que todo el mundo hable de ellos, como es el caso de eDreams, Infojobs, Idealista, Weblogs SL, Menéame o Zed.

Como lo que verdaderamente me atrae es la blogosfera y el entramado que se genera a su alrededor, me ha llamado la atención que en el cuerpo de la noticia se exponga que Ricardo Galli recibió una oferta de 2 millones de euros por el 30% de Menéame, lo que haciendo números rápidos implica que el portal estaría valorado a día de hoy en más de 6 millones de euros.

Pero, ¿realmente vale tanto Menéame? En mi opinión, ni de lejos. Si bien es cierto que tiene un volumen de visitas espectacular y que éstas no hacen sino crecer a un ritmo vertiginoso mes a mes, no creo que el nivel de ingresos esté -ni vaya a estar- en consonancia con tales datos. Los motivos, desde mi humilde punto de vista, son estos:

• Una parte significativa de sus usuarios poseen un perfil científico-técnico elevado, lo que normalmente trae asociado un bajo ratio de clicks en los banners.
• La portada es un popurrí de noticias muy diversas, desde las que hacen referencia a avances científicos, hasta las que se ocupan de las crónicas de sucesos o a la actualidad política. Como consecuencia, y a pesar de que desde un principio se apostó por los tags, se hace complicado contratar campañas publicitarias específicas para temas concretos.
• El diseño del portal no está pensado para maximizar los ingresos publicitarios.
• A diferencia de los medios de comunicación tradicionales, en Menéame la línea editorial la marcan sus usuarios. Son ellos los que deciden qué se publica en portada, qué se rechaza y cómo se valora la actualidad diaria. Dicho de otra manera: no existe control alguna sobre la información que circula por sus páginas. Eso hace ciertamente difícil llegar a acuerdos con determinadas empresas para promocionar sus lanzamientos, puesto que sus productos podrían ser duramente criticados por los visitantes del portal si no alcanzan las cotas de calidad requeridas, independientemente de los intereses que pudieran tener los propietarios de Menéame.

En definitiva, estamos ante un proyecto magnífico para el visitante, que cuenta con una comunidad que crece día a día y que en apenas un año y medio ha conseguido convertirse en una alternativa real a los diarios de toda la vida, pero que en mi opinión difícilmente será capaz de generar un volumen de ingresos importantes debido a su propia concepción.

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