Si echamos un poco de agua en una olla y luego la ponemos al fuego, en cuanto empiece a hervir el líquido se irá evaporando poco a poco hasta desaparecer por completo. Pero, ¿y si en lugar de verter agua lo que ponemos es Coca-Cola? ¿Qué obtendremos? En el siguiente vídeo encontramos la respuesta:
Tal y como se aprecia en el vídeo, una vez el agua que incorpora la Coca-Cola se evapora, queda un poso de apariencia pastosa que está compuesto por una mezcla de azúcar, colorante, acidulante y demás añadidos químicos presentes en este refresco. ¿No parece muy saludable, verdad?