Malos tiempos para Yahoo

Mientras Google Inc es cada día que pasa una compañía más conocida, más poderosa, más rica y más influyente, la no hace tanto poderosísima Yahoo está pasando por unos momentos ciertamente delicados. Lejos quedan sus tiempos de dominio en los que se permitía el lujo de utilizar el motor de búsqueda de una empresa llamada… llamada… ¡ah, sí!, Google. Qué cosas tiene la vida.

El 29 de enero, Yahoo hará públicos los resultados financieros que ha obtenido en el último trimestre del año y, por ende, en todo el 2007, y las previsiones indican que seguirán por debajo de las expectativas. De ahí que hayan comenzado a aparecer rumores en los que se apunta que la compañía podría prescindir de los servicios de entre 1.500 y 2.500 de sus trabajadores actuales. Otras fuentes corrigen a la baja esos números y, aunque corroboran que se producirán despidos, sitúan la cifra final por debajo del millar.

En cualquier caso, a nadie escapa que la situación por la que atraviesa Yahoo es complicada. De ahí que las medidas que van a adoptar para intentar revertir la situación sean nuevas en la casa. De hecho, en los 2 últimos años habían contratado a más de 2.500 personas hasta llegar a una cifra récord de 14.000 empleados.

¿Servirán estos despidos para elevar los beneficios de Yahoo? Es posible, pero la solución no llegará hasta que no desarrollen herramientas y servicios con los que plantar cara a Google, Facebook y MySpace, los tres cocos que le están restando cuota de mercado a pasos agigantados.

Y de paso no estaría de más que hicieran algo para dar un vuelco a su imagen de marca, aburrida como pocas. No conozco una empresa de este tamaño con menos carisma entre los usuarios de Internet. Google es adorada; Microsoft despierta sentimientos encontrados incluso entre aquellas personas que no sabrían vivir sin Windows, Office e Internet Explorer; Yahoo, por su parte, deja indiferente a casi todo el mundo.

Y no hay nada peor que eso. Que se lo digan sino a Apple, que durante muchos años ha vivido casi exclusivamente de su excelsa imagen. Una imagen que hacía que sus seguidores continuaran fieles a la marca aun a sabiendas de todas las limitaciones que comporta un mercado pequeño, exclusivo y cerrado. Más le valdría a Yahoo aprender de lo vivido por la compañía de la manzana.

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