Los chinos lo vuelven a hacer: con todos ustedes, ¡la PolyStation 3!

Todo empresario sin escrúpulos que se precie debe tener en China su tierra prometida. Un paraíso en el que cualquier mediocre carente de talento puede ganar dinero a espuertas copiando, calcando, fusilando los diseños de los gadgets de última generación que las grandes corporaciones occidentales han tardado años y miles de millones de dólares en desarrollar.

La inexistencia de una legislación que castigue la práctica de la copia industrial ha provocado que a lo largo de la última década hayan salido del gigante asiático artículos que imitan, que plagian, que fotocopian el diseño de productos tan diversos como juguetes, consolas, teléfonos móviles, coches, películas, discos, reproductores de DVD, bebidas, galletas y, en definitiva, de prácticamente cualquier cosa que se os pueda pasar por la cabeza. Todo lo inventado puede ser copiado.

De la piratería a gran escala china no se escapa nadie. No, Sony tampoco. Sin ir más lejos, ya han comenzado a circular por Internet las primeras imágenes y vídeos del penúltimo engendro que ha surgido en tan lejanas tierras: la PolyStation 3. Como casi siempre en estos casos, la carcasa da el pego, aunque mucho me temo que en el interior no habrá precisamente un chip Cell de 7 cores:

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