La industria musical pretende que paguemos hasta por respirar

El afán recaudatorio de discográficas, compositores e intérpretes estadounidenses no conoce límites. Bien que lo saben las tiendas de música online, esos oasis de paz y prosperidad que debían convertirse en la tabla de salvación de un sector que avanza a paso de tortuga y que no está sabiendo adaptarse al cambio de hábitos que está propiciando el uso de Internet, y que estos últimos días han comprobado que vuelven a estar en su punto de mira.

Y lo están por un asunto que provoca cierto sonrojo, cuando no vergüenza ajena. La American Society of Composers, Authors and Publishers (ASCAP) y la Broadcast Music, Inc. (BMI), 2 asociaciones que cumplen un papel muy similar al de la SGAE en España, se han puesto manos a la obra para que iTunes y el resto de tiendas del gremio les paguen, además de un porcentaje por cada canción que venden, una tasa extra por los fragmentos de 30 segundos que permiten escuchar a sus usuarios antes de comprar un tema.

Es decir, quieren cobrar un canon por los anuncios andantes y promociones que estos sitios hacen de los nuevos discos que sacan. Es el mundo al revés, vaya. Arguyen que ganan muy poco dinero por cada canción vendida, apenas unos céntimos, y que necesitan encontrar nuevas vías para financiarse si quieren seguir adelante.

Al parecer, siguen sin entender que los tiempos han cambiado y que la gente quiere tener la opción de escuchar, al menos parcialmente, una canción antes de comprarla para saber si es de su agrado o no. Olvidan que, con lo fácil que resulta bajarse música gratuitamente de BitTorrent, Rapidshare o Megaupload, lo último que deben hacer es poner palos a las ruedas, molestar a los que en definitiva son sus clientes y ponerlos en su contra. Vamos, digo yo.

Y con esta reclamación que han planteado sólo se me ocurren 2 posibles soluciones, ambas igual de malas para sus intereses:

  • Que iTunes & cia se nieguen a pagar y opten por eliminar la opción de escuchar estos fragmentos de 30 segundos a sus usuarios, lo que podría provocar una bajada en la venta de canciones
  • Que acepten y suban el precio de cada tema, una opción que, mucho me temo, también acabaría generando una caída en las ventas

Discográficas, compositores y cantantes sabrán. Son ellos lo que se están jugando las habichuelas en el envite y no nosotros. Pero más vale que utilicen la cabeza para reflexionar además de para cantar y contar dinero.

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