Aunque más de uno asociará esa frase a series como Misión Imposible o el Inspector Gadget, el título de la noticia tiene poco que ver con ellas. Lo he escogido porque la compañía británica Staellium UK ha lanzado al mercado un servicio denominado ‘StealthText’, que tiene la particularidad de que con él podemos enviar mensajes a otros telefónos móviles que se autodestruyen en cuanto el destinatario los lee.
Se trata de un producto ideado para ser utilizado por aquellas empresas que quieran tener la certeza de que cierto tipo de información se mantiene en el ámbito privado. Y qué mejor manera de conseguirlo que eliminando el texto una vez ha sido visualizado por la persona a quien iba dirigido.
El funcionamiento del sistema es el siguiente: cuando un mensaje es enviado con el servicio ‘StealthText’, el destinatario recibe una notificación donde se le indica el nombre de quien le ha hecho llegar la información y se le facilita un enlace al que debe acceder para leer el mensaje en sí. A partir del momento en que abre el link que se le proporciona, se inicia una cuenta atrás, pasada la cual se elimina el texto automáticamente.
Conscientes del éxito que puede tener su iniciativa, Staellium UK ha avanzado que a partir de la primavera del año que viene presentará en sociedad un servicio mejorado que abarcará también a los correos electrónicos y a los mensajes de voz y con fotografías.