En el 2004 Bill Gates pronosticó que las tecnologías que se estaban desarrollando en ese momento iban a acabar con el spam en un periodo no superior a los dos años. ¡Cuán equivocado estabas amigo! El problema es cada vez más grave, genera más pérdidas a las empresas y su resolución parece hoy en día una utopía.
Sin ir más lejos, y de acuerdo a los datos aportados por la compañía antispam IronPort Systems, en octubre se enviaron una media de 63.000 millones de correos basura al día, un número muy superior a los 31.000 millones que se detectaron 12 meses antes. Ello supone que el 88,7% de los mails que se envían son spam, un porcentaje que superará el 90% en noviembre y diciembre coincidiendo con la campaña de Navidad.
De hecho, las empresas del sector han avisado que en lo que queda de año se espera una avalancha de correo no deseado sin precedentes que puede acabar con la paciencia de más de uno. Y digo sin precedentes porque aunque es habitual que los spammers hagan horas extra en estas fechas aprovechando la fiebre consumista que nos invade, las previsiones son que en esta ocasión la cosa vaya mucho más allá y en diciembre se alcancen los 78.000 millones de correos basura al día, una cifra que pone los pelos de punta sólo de leerla.
Los analistas de Forrester Research señalan que las mejores herramientas antispam de la actualidad son capaces de interceptar el 98% del spam, lo que supone que el 2% restante campa a sus anchas por las bandejas de entrada de nuestros correos. En números, y aplicando una sencilla regla de tres, ello supone que el mes que viene habrá 1560 millones de mails no deseados que llegarán a buen puerto.
Pero el spam no afecta únicamente a las cuentas de correo. Todos aquellos que tenemos un pequeño espacio en Internet debemos lidiar a diario con los inconvenientes de esta auténtica plaga. En el caso concreto de Abadía, cada semana recibo cientos -cuando no más- de mensajes y trackbacks basura en los comentarios de las noticias que el filtro se encarga, con bastante éxito todo sea dicho, de eliminar automáticamente. Distinta es la situación en los foros, donde a diario debo borrar uno a uno, y de manera manual, los posts que son capaces de burlar las medidas antispam que incorpora PostNuke.