El fabricante automovilístico Toyota ha desarrollado un sistema que permite controlar una silla de ruedas eléctrica con la mente gracias al uso de un gorro equipado con sensores que monitoriza las ondas cerebrales y hace llegar la información a un ordenador, que es el encargado de interpretar esos datos y enviar las órdenes correspondientes al motor eléctrico que gobierna los movimientos de la silla.
Los científicos al frente del proyecto han explicado que es necesario un entrenamiento previo de unas 3 horas diarias durante una semana para aprender a manejar el conjunto. Una vez se consigue, el sistema responde en tan solo 125 milisegundos a las órdenes que recibe con una precisión cercana al 95%.
La intención de Toyota es hacer de esta silla un producto comercial que pueda ser utilizado por pacientes que han sufrido accidentes o padecen enfermedades degenerativas graves que les limitan el movimiento. En todo caso, para ello todavía habrá que esperar un tiempo.
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