El Apple Watch es por fin una realidad. Hacía años que se especulaba con que la compañía de la manzana estaba trabajando en el diseño de un reloj inteligente, pero no ha sido hasta esta tarde que se ha desvelado oficialmente su diseño y características técnicas. La espera ha sido larga, pero a la vista de los resultados obtenidos, parece que ha valido la pena.
Y es que, tal y como puedes ver en las imágenes, es un dispositivo que llama la atención a cualquiera que lo observe gracias a su diseño llamativo y elegante. La interfaz de usuario es además realmente innovadora y muy diferente a la del resto de relojes inteligentes que se han visto hasta ahora.
El centro del Apple Watch es una pantalla táctil rectangular que se puede recargar de manera inalámbrica. Integra soluciones inteligentes que consiguen, por ejemplo, que se encienda automáticamente cuando su portador levanta el brazo.
Apple ha puesto mucho énfasis en remarcar que el Watch es un dispositivo ideal para realizar un seguimiento de la actividad física. De hecho, integra un acelerómetro para calcular los pasos y los movimientos corporales, un sensor de frecuencia cardíaca para medir la intensidad de los ejercicios que se hacen y toma datos del iPhone para evaluar las distancias que se recorren.
La habitual corona de los relojes analógicos también está presente en el Watch, pero ha sido rediseñada por completo por los ingenieros de Apple hasta convertirla en un mecanismo multifunción que permite navegar por los menús, hacer zoom o seleccionar elementos sin tener que tapar la pantalla con el dedo.
Apple ha diseñado el Watch para que, una vez sincronizado con el iPhone, nunca muestre la hora con una desviación mayor a 50 milisegundos respecto al estándar mundial y para que se ajuste automáticamente al horario local cuando su propietario viaje a otro país.
El Watch se va a ofrecer en dos tamaños distintos: con caja de 38 y de 42 milímetros. La idea de Apple es hacerlo atractivo tanto para los hombres como para las mujeres, que en caso de ofrecerse un único modelo podrían considerarlo demasiado grande.
Apple va a comercializar tres colecciones de este reloj inteligente: el Watch, con caja de acero inoxidable en plata o negro espacial y cristal de zafiro; el Watch Sport, que tiene una caja de aluminio anodizado en plata o gris espacial y vidrio Ion-X reforzado; y el Watch Edition, que luce una caja en oro o en oro rosa de 18 quilates y cristal de zafiro.
Cada una de estas colecciones tiene asociada una amplia gama de correas para que los compradores de este smartwatch puedan adaptarlo a su gusto. Tan extensa es que Apple asegura que existen más de dos millones de posibilidades de personalización diferentes.
La comercialización del Apple Watch, prevista para principios del próximo año, va a provocar un aumento exponencial en la popularidad de estos dispositivos, desconocidos para la mayoría de consumidores. Y es que, a pesar de que fabricantes como Samsung, LG, Motorola o Pebble han puesto a la venta casi una decena de modelos en el transcurso del último año, las características y calidad de los acabados del Watch van a inyectar una nueva vida a esta nueva categoría de consumibles electrónicos.
Si el 2007 es considerado como el año en el que nacieron los smartphones modernos de la mano del iPhone original y el 2010 ha pasado a los anales por ver aparecer a los tablets, este 2014 va a ser recordado como el momento en el que se popularizaron los smartwatches o relojes inteligentes.
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